Pedir al público un aplauso, me parece una pretensión egocéntrica propia de individuos orgullosos con delirios de grandeza.
Me vino a la mente particularmente por casos de banditas musicales que creen que por estar arriba de una tarima, tienen talento y la gente los debe admirar. Pero aplica también a otros escenarios.
Para que una determinada audiencia decida premiar al artista con su aplauso, es necesario que cumpla dos requisitos: saber apreciar el arte, y que la obra en cuestión sea de su agrado.
No porque el músico se sienta muy virtuoso significa que su música realmente lo sea. Y no porque su interpretación o composición refleje un gran talento y desempeño técnico, les tiene que gustar a todos.
¡Humildad, payasos! ¡Que están aquí para entretenerme!
Update 2020-04-20
No lo escribí en su momento, pero recuerdo por qué hice este post. Tenía que ver con una banda exigiendo aplausos del público, como si fuera obligación, creo que llegando al grado de molestarse un miembro de la banda.
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